lunes, 24 de mayo de 2010

Los megaconciertos crecen, pero ¿también la evasión tributaria?

Fuente: Gestión

CARMELA LOAYZA ARENAS

Treinta millones de dólares movió el negocio de los conciertos internacionales durante el 2009, y este año la cifra podría ser mayor, pues se esperan más grandes conciertos.

Sin duda, estos ingresos deberían alegrar no solo a las empresas que realizan los conciertos o a quienes asisten a ellos, sino a todos los peruanos, ya que representan una mayor recaudación de impuestos.

Sobre todo si se tiene en cuenta que, según Armando Massé, presidente de Apdayc, en cualquier evento internacional un tercio de todo lo generado es para pagar al artista, otro tercio es para impuestos y gastos y el resto es para el empresario (Gestión 18.05.2010).

Pero, al parecer, esto no siempre es así.

DEUDA IMPAGA

Fuentes del Congreso indicaron a Gestión que, según un informe presentado por la Sunat a algunos congresistas, en el periodo 2003-2008, de las 326 empresas que tuvieron actividad, el 80% ha acumulado una deuda tributaria equivalente a S/. 58 millones y, lo que es peor, el 77% de esa deuda equivale a Impuesto a la Renta e Impuesto General a las Ventas.

Muchos consideran que el auge de este tipo de espectáculos se dio a partir de la aprobación de una ley promovida por la congresista Luciana León, que logró eliminar el 15% del impuesto municipal, reducir a la mitad el Impuesto a la Renta a los no domiciliados (lo que debe pagar el artista) y bajar del 10% al 5% la tasa por derecho de autor) (Gestión 25.04.2008).

Además de impulsar el sector y permitir la llegada de grandes artistas a nuestro país, se esperaba que esta norma permitiera facilitar el cumplimiento de las obligaciones tributarias de las empresas.

Consultada por Gestión, la congresista Luciana León, promotora de la ley que rebajó los impuestos, señaló que muchas de las empresas que incumplen son las llamadas “golondrinas”, que realizan un espectáculo y desaparecen.

Según la información recibida, un 30% de las empresas que realizaron espectáculos públicos (125) se crearon en fecha cercana a la realización del evento.

MODALIDADES DE EVASIÓN

Según fuentes del Congreso, las modalidades de evasión detectadas por la administración tributaria responden a tres tipos:

La primera es pagarle al artista que viene al país un monto determinado, pero declarar a la Sunat un monto menor.

El empresario que trae a un artista tiene que informar, por lo menos, quince días antes del espectáculo qué monto le va a pagar al artista y otras condiciones y la Sunat, haciendo cruce de información, puede detectar la diferencia.

La segunda modalidad es que los ingresos obtenidos por la venta de entradas no se declaran en su totalidad. En estos casos, la Sunat controla cada entrada que se muestra al ingresar al concierto, y al día siguiente hace un arqueo y determina cuánto dinero entró, luego se contrasta con la empresa que vende las entradas, pero el contribuyente declara mucho menos.

Una tercera modalidad es que las empresas que oficialmente traen al artista y publicitan el evento no son las que se presentan ante Sunat para hacerse responsables por todo el tema tributario.

Se presentan terceros que no cuentan con el respaldo económico para hacer frente a las acciones de cobro cuando se detectan deudas impagas.

La información precisa que de 326 contribuyentes, 204 presentaron declaración de IGV y 68 declararon ventas iguales a cero, y a pesar de haber declarado deuda muchas empresas no pagan y otras declaran menos de lo que deben.

Foto: Radiohead en vivo

No hay comentarios:

Publicar un comentario